Ayer llegó el esperado libro «Astrofotografía de paisaje«, de Manel Soria (Agrimensor Frikosal) y Roger Eritja.
La primera sensación al abrir la caja es «¡Oooh!». Es la magia del papel. Ver la conocida fotografía de Manel «La Vía Láctea sobre la Naveta des Tudons» en portada no tiene precio. Este asombro tiene también que ver con la excelente calidad de impresión que ya se ve en la portada.
¿Qué espero del libro?
Antes de abrir la caja he hecho un ejercicio y he apuntado lo que espero de él. Espero, sobre todo, un libro ameno, didáctico, que explique cómo hacer fotografías de calidad de paisajes nocturnos con los astros. Espero, sobre todo, que explique cómo tratar el ruido, técnica y programas para apilado de imágenes, cómo conservar el color de las estrellas, cómo prever composiciones del paisaje y los astros en un lugar determinado, quizás con la ayuda de algún programa o app. Por supuesto espero que se explique cómo se hicieron algunas fotografías. Aunque no le doy tanta importancia, también imagino que hablará de las cámaras, sensores digitales y objetivos más adecuados, así como de monturas ecuatoriales, caseras o no. No espero que haya muchas fotografías a doble página o página completa, creo que se perdería un espacio precioso para explicar lo que creo esencial del libro. Pero sí alguna para disfrutar y hacer más amena la lectura.
Al abrir el paquete y después de contemplar la portada, me voy al índice a ver si se cumplen mis expectativas en cuanto al temario. ¡100 % satisfecho, está todo lo que pedía! Hay algunos otros temas que despiertan en mí un «¡Oh, eso sí!», temas que no he enumerado antes pero creo que también esperaba, como la realización de fotografías cuando no es noche cerrada y las panorámicas nocturnas.
Empiezo a leer. El prólogo, de Tino Soriano, no tiene desperdicio. Transita hábilmente desde una fina crítica a los creacionistas hasta el análisis de alguna de las fotografías del libro, apoyándose en imágenes icónicas de la historia de la fotografía. Y con su característico sentido del humor, por supuesto. Luego, la introducción de los autores. Invita de tal manera a fotografiar el paisaje y los astros que, cuando acabo, tengo que volver atrás, absorto, pues me he olvidado de recrearme en las bellas fotografías de estas primeras páginas.
No puedo acabar sin poner una pega, la letra me parece algo pequeña y gruesa. Es mi sensación al leer. Luego lo he comparado con libros similares de fotografía y, efectivamente, todos ellos tienen la letra más grande y fina.
El preciado tesoro vuelve a la caja en la que ha llegado. Todavía no me atrevo a ponerlo en mi biblioteca de fotografía, no quiero se melle ni lo más mínimo. Me queda sumergirme en él y ver si el contenido y la forma de explicar las cosas cumplen mis expectativas (que son altas). Pero eso requerirá tiempo y paciencia hasta poder explicarlo aquí.
¿Y vosotros? ¿Tenéis el libro? ¿Qué os ha parecido? Espero vuestros comentarios.
Hola, también he comprado el libro con grandes expectativas y estoy un tanto decepcionada. Estoy de acuerdo contigo que la letra es muy pequeña, pegada y complicado de leer pero no estoy de acuerdo con el tema de las fotografías, las encuentro con poca definición, poco espectaculares y repetitivas (sobretodo si has asistido a charlas de alguno de sus autores). Por otro lado, he empezado a leer el capítulo de técnica fotográfica y se me ha hecho costoso y para mi gusto con demasiada paja. Tal vez una vez consultado todo cambie de opinión pero de momento, me decepciona.
Hola Marta. Entiendo que para tí las fotos no sean espectaculares, eso es una cuestión muy personal.
En lo que respecta al contenido fotográfico. Para hacer un libro creo que hay dos opciones radicalmente diferentes, con todos los matices que pueda haber entre los extremos. El más deseado por los lectores, por supuesto, es que todas las fotografías sean inéditas. No es el caso de este libro ni la manera de hacer de los autores, por lo menos hasta ahora. Se han dedicado a divulgar la astrofotografía de paisaje ampliamente, todo lo que han podido, con unas fotografías costosas de realizar en cuanto al tiempo dedicado. Para mí (y creo que para muchos) es un placer. Esa amplia divulgación tiene un precio, que es el que comentas, un libro con muchas de sus fotos ya conocidas. Si no fuera así quizás no lo tendríamos en nuestras manos. Obviamente hubiera sido mejor con fotografías inéditas, por supuesto.
En lo que se refiere a las explicaciones sobre la técnica no he llegado todavía, por lo que no puedo opinar.
En cuanto a las fotografías con poca definición lo podríamos comentar si pusieras algunos ejemplos concretos.
Hola Valentí,
Yo también lo he leido y me parece una buena aportación a la literatura (escasa creo yo) que hay sobre el tema. Al igual que tu, el índice ya me resulto satisfactorio y confirmó que con esta obra iba a aprender unas cuantas cosas nuevas. Las fotografías las encuentro magníficas, y ciertamente he disfrutado con ellas (especialmente con la primera que encontramos en el interior….que belleza). Me ha resultado treméndamente ameno y felicito a los autores por ello.
Como no todo van a ser alabanzas, creo oportuno comentar lo que me ha parecido mejorable:
1. Aunque la impresión y la calidad del papel es de lujo, las tapas blandas desmerecen la obra. Supongo que unas tapas duras y sobrecubierta habrían encarecido la edición, y quizás no resultara tan atractiva la compra.
2. Definitivamente la letra es muy pequeña. Tengo muy buena vista y me he tenido que esforzar en la lectura.
3. Se hace corto. Aunque se tratan los temas importantes, algunos capítulos son muy pequeños y me han dejado un poco en el aire. Ya sé que no es un tratado, pero un poco más de extensión y desarrollo no habría venido nada mal.
4. Y esto es una apreciación personal (más bien una manía). No me gustan los libros en formato cuadrado….jejejeje
En resumen. Muy recomendable. Ya tiene reservado un puesto de honor en mi biblioteca.
Un saludo
Hola Juan,
Totalmente de acuerdo en lo de las tapas. Está en línea con lo de la letra pequeña, para hacer el libro más económico. ¡Y estoy seguro que a mí también se me va a hacer corto!