Tormenta y lluvia sobre el rio Aguarico, Cuyabeno, Ecuador. Storm cloud and rain over Amazonian Jungle, Cuyabeno, Ecuador

Tormenta y lluvia sobre el rio Aguarico, Cuyabeno, Ecuador. Storm cloud and rain over Amazonian Jungle, Cuyabeno, Ecuador

Quizás sería mejor hablar de bosque lluvioso tropical, término más preciso y que nos da una idea más clara de los problemas que vamos a encontrar: lluvia, humedad y temperaturas elevadas. Son los peores enemigos del equipo fotográfico y hay que ir bien preparados para protegerlo. Y de eso voy a hablar, de cómo proteger el equipo fotográfico en la selva.

Lo primero de todo es contar con una mochila cómoda y no sólo impermeable, sino incluso sumergible. Hace años que inicié la búsqueda de esa mochila cuando aún no existían las fabulosas (y pesadas) DryZone de Lowepro y hacía muchas fotografías de descenso de barrancos o «cañoning». La idea era poner la mochila de fotografía dentro de una funda sumergible y fácilmente transportable en todo tipo de situaciones. Después de mucho buscar solo encontré una que cumpliera las características que buscaba: una mochila de Rip Curl (la que se puede ver en la fotografía siguiente). Esta mochila actualmente no se fabrica, es una lástima. Está fabricada en PVC, es sumergible y cuenta con tirantes acolchados y ergonómicos  y cinturón para caminar horas y horas cómodamente. Es parecida a esta otra.

Caminando por un río de la Reserva Itapoa, Esmeraldas, Ecuador. Walking through a river in Itapoa Reserve, Esmeraldas, Ecuador

Caminando por un río de la Reserva Itapoa, Esmeraldas, Ecuador. Walking through a river in Itapoa Reserve, Esmeraldas, Ecuador

Alguien pensará que esto es una tontería, que lo más cómodo es llevar la mochila de fotografía y un poncho encima que lo cubra todo: nada más lejos de la realidad. El poncho es un estorbo, se engancha en todas partes y es fácil pisarlo en las subidas. Además es como un horno, te acabas mojando igualmente con la transpiración y esta humedad pasa a la mochila de fotografía. Personalmente prefiero no cubrirme con nada y mojarme. Ahora bien, el poncho es muy útil a la hora de realizar fotografías en situaciones estáticas, por ejemplo con el trípode: nos permite cubrir a la cámara y a nosotros mismos. De la misma forma es muy útil el paraguas, ya sea soportado por el/la asistente o bien atado al trípode.

En situaciones donde se requiere libertad de movimiento utilizo una funda para la lluvia para proteger la cámara. Son realmente incómodas, se empañan por dentro pero a veces no hay otra opción. Concretamente utilizo una funda Kata E-702.

Una cosa es proteger la cámara del agua para evitar daños (aunque hoy en día las cámaras profesionales y semiprofesionales suelen tener cierta protección) y otra es evitar que las gotas de agua mojen la parte frontal del objetivo. Ya sea utilizando la funda para lluvia, el paraguas o el poncho el parasol es imprescindible para proteger el objetivo.

Navegando por el río Aguarico en un día de lluvia. Sailing down the Aguarico River on a rainy day

Navegando por el río Aguarico en un día de lluvia. Sailing down the Aguarico River on a rainy day

A pesar de todo la humedad reinante en el ambiente seguro que acaba penetrando en el equipo al final del día. Es por ello que al acabar la jornada guardo todo el equipo dentro de la mochila impermeable junto con una bolsa transpirable llena de gel de sílice. El gel de sílice lo encontramos habitualmente en esas pequeñas bolsitas que acompañan los aparatos electrónicos u ópticos. Su gran capacidad de absorción de la humedad hacen que sea un excelente desecante. De esta manera se evita la formación de hongos en las lentes. Es importante que el gel de sílice lleve un indicador de humedad, de forma que cuando esté saturado cambie de color. Puede volver a ser útil si lo calentamos en el horno para eliminar la humedad.

Valentí Zapater